Los ejes de popa marinos, también conocidos como ejes de hélice, son componentes críticos en el sistema de propulsión de un barco. Conectan el motor del barco a la hélice, transmitiendo potencia para impulsar el barco a través del agua. Estos ejes suelen estar fabricados con materiales de alta resistencia y resistentes a la corrosión para soportar el duro entorno marino y cargas pesadas. Los materiales comunes utilizados para los ejes de popa marinos incluyen:
Acero inoxidable: El acero inoxidable es una opción popular para los ejes de popa marinos debido a sus excelentes propiedades de resistencia a la corrosión, resistencia y durabilidad. Los tipos de acero inoxidable como 316 y 17-4 PH se utilizan a menudo en aplicaciones marinas.
Acero al carbono: Ciertos tipos de acero al carbono, particularmente aquellos con alta resistencia a la tracción y a la corrosión, se utilizan para ejes de popa en embarcaciones más pequeñas y ambientes marinos menos corrosivos. El recubrimiento y el mantenimiento adecuados son esenciales para prevenir la corrosión en los ejes de acero al carbono.
Bronce de níquel-aluminio (NAB): las aleaciones NAB, como la C95800, se utilizan ampliamente en entornos marinos debido a su excelente resistencia a la corrosión, alta resistencia y buena maquinabilidad. Estas aleaciones están diseñadas específicamente para aplicaciones marinas y se utilizan a menudo para ejes de popa en barcos más grandes.
Acero inoxidable dúplex: Los aceros inoxidables dúplex, como UNS S31803/S32205, ofrecen una combinación de alta resistencia y excelente resistencia a la corrosión. Se utilizan en aplicaciones marinas exigentes, incluidos ejes de popa para embarcaciones grandes.
Monel: Monel es una aleación de níquel y cobre conocida por su excepcional resistencia a la corrosión en diversos entornos, incluidos los entornos marinos. Se utiliza en aplicaciones marinas específicas donde la resistencia a la corrosión del agua de mar es crucial.
La elección del material depende de factores como el tamaño de la embarcación, el entorno operativo (agua salada o dulce), las cargas esperadas y el uso previsto de la embarcación. La selección adecuada de materiales y el mantenimiento regular son esenciales para garantizar la longevidad y confiabilidad de los ejes de popa marinos.